Porta fusible cilindricos

Esta es la especificación de seguridad más importante. Si bien la protección final la da el fusible que instales, el portafusible tiene sus propios límites constructivos. Los portafusibles de este tipo para montaje en panel están diseñados típicamente para un voltaje máximo de 250V AC y una corriente máxima de 10 Amperios (10A).

Esto significa que puedes usarlo de forma segura en la red eléctrica de 220V, siempre y cuando el fusible que instales sea de 10A o menos. Nunca debes usar un fusible con un amperaje superior al que soporta el portafusible.

Este es un portafusible para montaje en panel. La instalación es sencilla:

1. Se realiza una perforación circular en el panel o chasis de tu proyecto. El diámetro estándar para este tipo de portafusibles es de aproximadamente 12mm a 13mm (o 1/2 pulgada).
2. Se inserta el cuerpo del portafusible desde la parte trasera del panel.
3. Se asegura por la parte frontal con la tuerca plástica incluida.
4. Los cables se sueldan a los terminales en la parte trasera.

Recomendación: Aunque el tamaño es estándar, siempre es una buena práctica medir el diámetro de la rosca del portafusible específico que recibas con un pie de rey (calibrador) antes de realizar el corte definitivo en tu panel.

La ubicación del fusible es crítica para una protección efectiva. El portafusible debe colocarse siempre en serie con la línea de alimentación que se desea proteger, y lo más cerca posible de la fuente de energía.

• Para Corriente Alterna (AC 220V): Debe instalarse obligatoriamente en el cable de Fase (o Línea Viva). Nunca se debe colocar en el cable Neutro o en la Tierra de protección. Idealmente, justo después del conector de entrada de alimentación del equipo.
• Para Corriente Continua (DC): Debe instalarse en la línea de alimentación positiva (+), tan cerca como sea posible del terminal positivo de la batería o de la salida de la fuente de poder.

La elección del tipo de fusible es tan importante como la del valor en Amperios. Los fusibles de 5x20mm vienen principalmente en dos tipos:

• Acción Rápida (Fast-Blow / «F»): Se queman casi instantáneamente cuando la corriente supera su valor nominal. Son ideales para proteger circuitos electrónicos sensibles con componentes semiconductores (microcontroladores, circuitos integrados) que no toleran sobrecorrientes ni por un instante.
• Acción Lenta (Slow-Blow / Time-Delay / «T»): Están diseñados para soportar picos de corriente breves y altos (mayores a su valor nominal) sin quemarse. Son indispensables para proteger cargas inductivas como motores, transformadores o fuentes de poder, que tienen una alta corriente de arranque (inrush current). Usar un fusible rápido aquí haría que se queme innecesariamente al encender el equipo.

Elige el tipo según la naturaleza de la carga que estás protegiendo.

La regla general es elegir un fusible con un valor nominal que sea aproximadamente un 25% a 50% superior a la corriente de operación normal y continua de tu circuito. Esto le da un margen para evitar que se queme por pequeñas fluctuaciones, pero asegura que se abra rápidamente en caso de un fallo real.

Ejemplo: Si tu proyecto consume 1A de forma continua, un fusible de 1.25A o 1.5A sería una elección adecuada. No elijas un valor demasiado alto (ej. 5A para un circuito de 1A), ya que eso no protegería adecuadamente tu circuito; el fusible solo se quemaría ante un cortocircuito catastrófico, pero podría permitir que una sobrecorriente dañina destruya tus componentes antes.

Cada tipo tiene un propósito específico:

• Portafusible de Panel (este modelo): Su principal ventaja es la accesibilidad. Permite al usuario final reemplazar un fusible quemado de forma rápida y segura desde el exterior del equipo, sin necesidad de abrir el gabinete. Es el estándar para productos comerciales y equipos de laboratorio.
• Portafusible de PCB: Se suelda directamente a la placa de circuito. Es una solución de bajo costo y compacta para una protección interna que no se espera que el usuario final manipule.
• Portafusible en Línea (In-line): Es un pequeño contenedor que se intercala en un cable. Es ideal para añadir protección a un dispositivo existente o para aplicaciones automotrices y de bajo voltaje donde no hay un panel para montar un conector.